Foto: Daily Mail
(Caracas, 17 de septiembre. Noticias24).- La policía y los servicios familiares de Florida, en EE UU, han informado sobre la desgarradora infancia de un niño de 13 años, acusado de golpear hasta la muerte a su hermano de 2 años.
Cristian Fernández sufrió el abandono de una madre adolescente y una abuela adicta a las drogas, luego el abuso sexual por parte de un primo y agresiones físicas por un padrastro que despues se suicidó.
Cristian, quien tenia sólo 12 años cuando estrelló la cabeza de su hermano contra un estante, podría convertirse en el más joven sentenciado de por vida en la historia de Estados Unidos, al ser juzgado como un adulto.
El caso ha suscitado un intenso debate sobre si es castigo es demasiado estricto,sobretodo para un niño que creció en un ambiente tan escabroso y lleno de abusos. Cristian nació en Miami en 1999, su madre es Susana Biannela, que entonces tenía solo 12 años y su padre, de 25 años entonces, recibió una condena de 10 años de libertad condicional por abusar sexualmente de ella.
Dos años después, madre e hijo se mudaron a una casa hogar, luego que las autoridades encontraron al niño en la calle, caminando sucio y desnudo a las 4 de la mañana, cerca del motel donde se encontró a su abuela, que debía cuidarlo, rodeada de cocaína.
En 2007, cuando Fernández tenía ocho años, el Departamento de Niños y Familias investigó un reporte de que sufrió de abuso sexual por parte de un primo mayor. Los funcionarios observaron otros hechos como que Cristian mató a un gato, simuló tener sexo con compañeros de clase y se masturbaba en la escuela. El niño aprendió a ocultar sus sentimientos y una vez le dijo a un consejero: “Tienes que tragarte tus sentimientos y superarlo”.
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En octubre del 2010, Cristian Fernández y su madre se fueron a vivir con el nuevo marido de esta y poco después sufrió una lesión en el ojo, tan grave que su escuela lo envió al hospital a ver si no tenia daño en la retina.
Cristian le dijo a la policía que su padrastro lo había golpeado y cuando los agentes fueron al apartamento de la familia consiguieron al hombre muerto por una herida de balaque se infligió él mismo. La familia se mudó a Jacksonville y Fernández inició la escuela media, obteniendo las mejores calificaciones.
El 3 de junio de 2011, las autoridades fueron llamados a la vivienda, el hermano de solo dos años de Cristian, David, fue encontrado muerto. Tenia fractura de cráneo, un hematoma en el ojo izquierdo y una severa hemorragia cerebral.
Su madre Susana, entonces de 25 años, confesó a los investigadores que había dejado a Cristian, David y sus otros hijos solos. Cuando regresó, dijo que encontró a David inconsciente.Luego se supo que mientras ella navegaba en Internet por cuatro horas, su hijo menor estaba muriendo y ella admitió que busco información sobre las conmociones cerebrales del niño antes de llamar a la policía.
Susana reveló además que dos semanas antes, jugando a la lucha, Cristian le había roto una pierna al niño. El forense dijo que David pudo sobrevivir si lo hubieran llevado antes a un hospital y por eso ella fue acusada de homicidio agravado, se declaró culpable y podría pasar hasta 30 años en prisión.
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Mientras, Cristian fue acusado de asesinato en primer grado. A esto se agregó otra acusación, cuando su medio hermano de cinco año le dijo a un psiquiatra que Fernández abusó sexualmente de él. El muchacho ha hablado abiertamente con investigadores y terapeutas sobre sus crímenes.
“Cristian negó cualquier plan o intención de matar a su hermano”, escribió un médico psiquiatra. “Parecía más bien defensiva al hablar de lo que provocó su ira”.
“Dijo que recordó los abusos de su padrastro y ese fue el motivo de este delito”,dijo el especialista, que resaltó que Cristian no parecía afectado emocionalmente mientras narraba el incidente. Fernández ha sido acusado como un adulto, lo que lo hace el más joven en espera de juicio en el condado de Duval.
En base a las evaluaciones psicológicas de Cristian, los fiscales consideran que el joven representa un riesgo por su comportamiento violento y está acusado por dos delitos graves. Si es declarado culpable de cualquier cargo, podría enfrentar cadena perpetua,posibilidad que ha generado reacciones a favor y en contra.
El caso es uno de los más complejos y difíciles en los tribunales de la Florida, y podría cambiar la forma en que se manejan los delitos de asesinato en primer grado que involucren a menores de edad a nivel del estado.
Una complicación consiste en si Fernández entiendió sus derechos durante los interrogatorios policiales. Richard Kuritz, un ex fiscal de Jacksonville que ahora es un abogado defensor, dijo que si bien todos están de acuerdo en que Cristian debe enfrentar las consecuencias de sus actos no está claro cual debería ser el castigo.
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“¿Cuál sería una sentencia justa? No creo que este caso va a terminar a corto plazo “, dijo Kuritz, quien ha estado siguiendo el caso de cerca. Quienes apoyan a la fiscal Angela Corey, creen que hace lo correcto al juzgar al niño como un adulto. Pero otros, como Carol Torres consideran que debería ser sentenciado por una corte juvenil y que necesita ayuda, no una vida en prisión.
“Debe ser rehabilitado y tener una segunda oportunidad en la vida”, dijo Torres, de 51 años. Su nieto fue a la escuela con Fernández y ha creado una página en Facebook para apoyarlo. En otros estados, los niños acusados de crímenes violentos son a menudo acusados o condenados como delincuentes juveniles.
En 2011, un niño de Colorado se declaró culpable de matar a sus dos padres cuando tenía 12 años, fue condenado a una pena de siete años en un centro de menores y tres años de libertad condicional.
Mientras, un muchacho de Pensilvania fue acusado de matar a la novia de su padre,que estaba embarazada, por esto fue enviado este año a un centro de menores donde podría permanecer bajo custodia estatal hasta que cumpla 21 años.
El mes pasado, el juez Mallory Cooper dictaminó que sus interrogatorios no son admisibles, diciendo que no podía por desconocimiento renunciar a su derecho a permanecer en silencio y consultar a un abogado. La fiscalía está apelando.
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